Cirugía refractiva con lentes ICL en Miranza IOA: “Fue salir de la operación y ver un nuevo mundo”
Para un diseñador gráfico como Luis, tener una buena visión y un buen confort visual es fundamental en su trabajo. Esto le llevó a realizarse una cirugía refractiva con lentes intraoculares en nuestra clínica Miranza IOA, una decisión que asegura que le ha supuesto un cambio de vida: “Fue salir de la operación y ver un nuevo mundo. Algunos de mis amigos hasta me han dicho que tengo una mirada distinta, más animada y feliz”.
La libertad y comodidad que proporciona poder ver claro y nítido sin necesidad de depender de las gafas, es una de las ventajas que muchos pacientes experimentan después de una cirugía refractiva. En el caso de Luis –con más de 4 dioptrías de hipermetropía en ambos ojos y un ligero astigmatismo–, el hecho de haber corregido con gran precisión sus problemas visuales también le ha permitido reducir las molestias que notaba al pasar horas frente al ordenador.
Para pacientes con muchas dioptrías, las lentes ICL pueden ser una eficaz y satisfactoria opción
Dado que cada persona tiene unas necesidades específicas y cada ojo es distinto, indicar la mejor solución quirúrgica de forma personalizada, entre las distintas técnicas disponibles, es uno de los retos del cirujano. Los procedimientos basados en el uso del láser no siempre son los más adecuados para todos los pacientes, que también pueden verse beneficiados de otras alternativas seguras y eficaces como la cirugía refractiva con lentes intraoculares. “Luis me pareció un paciente idóneo para operar con lentes ICL”, explica el Dr. Ricardo Pérez, especialista de Miranza IOA.
Las lentes ICL o lentes implantables de colámero (un material muy flexible y totalmente biocompatible hecho a base de colágeno) son similares a una lentilla, pero se colocan dentro del globo ocular, por encima del cristalino. Al no sustituir esta estructura ni alterar la córnea o capa superficial del ojo, son fácilmente extraíbles si en algún momento cambian las necesidades visuales del paciente.
Además, como destaca el Dr. Pérez, “otra ventaja es que cubren un amplio rango de dioptrías, de modo que el hecho de tener altas miopías o hipermetropías no tiene por qué ser una limitación para operarse de cirugía refractiva si realizamos un buen estudio previo”.
Operarse de cirugía refractiva con lentes ICL en Miranza IOA, una oportunidad para Luis
La cirugía refractiva con lentes ICL en Miranza IOA y el resto de clínicas de nuestro grupo es una intervención ambulatoria, que solemos realizar con anestesia tópica (gotas) y que apenas dura unos 15-20 minutos, por lo que resulta muy rápida y sencilla para los pacientes. Así pudo constatarlo Luis, quien destaca que no notó ninguna molestia, ni siquiera después de salir de quirófano, cuando pudo comprobar prácticamente de inmediato su ganancia visual. Estos buenos resultados, y la posibilidad de apreciarlos retomando muy pronto sus actividades cotidianas y su trabajo, hacen que nuestro paciente no dude en recomendar la intervención y valorarla como una gran oportunidad que ha superado incluso sus expectativas.