Tratamientos oculares
Operación de párpados
¿En qué consiste la operación de párpados?
Cuando hablamos de la operación de párpados, se tiende a pensar únicamente en términos de estética. Sin embargo, hay muchos problemas palpebrales que van más allá de nuestro aspecto y afectan a nuestra visión y salud ocular, ya que impiden un correcto funcionamiento de “la persiana” del ojo.
Los párpados intervienen en la protección del ojo (frente al exceso de luz, lesiones…) y ayudan a mantenerlo hidratado, distribuyendo la lágrima sobre la superficie ocular y recogiéndola hacia el conducto nasolagrimal. Además, la posición de los párpados influye en nuestro campo visual, que puede quedar reducido si estos están caídos.
Mediante una gran variedad de técnicas de cirugía y reconstrucción palpebral, buscamos que los párpados puedan cumplir su función de forma eficaz, siendo conscientes del papel que también juegan en la expresión de la mirada y del rostro. Por eso, apostamos por intervenciones que procuran evitar o minimizar las cicatrices visibles.
Técnicas
La cirugía para corregir la ptosis palpebral es una de las principales operaciones de párpados y disponemos de un amplio abanico de procedimientos para tratar la patología según su causa. En este sentido, la blefaroplastia, la cirugía estética más practicada en el rostro junto con la rinoplastia, nos permite tratar ciertos tipos de ptosis, en cuyo caso la finalidad de la intervención no es meramente estética, ya que solventar la caída del párpado mejora el campo visual.
También abordamos otros tipos de malposiciones palpebrales, además de la ptosis. El lifting mediofacial por vía transconjuntival, indicado para corregir la retracción del párpado, es una de las técnicas que nuestros especialistas han introducido de forma pionera en Europa.
Enfermedades oculares que trata la operación de párpados
Además, otro problema común que tratan los cirujanos oculoplásticos de Miranza es la retracción palpebral, cuando el párpado inferior está más bajo de lo habitual o el superior demasiado alto. Esto puede ocurrir por múltiples causas (traumatismos, enfermedades tiroideas, parálisis faciales, secuelas de una blefaroplastia mal practicada etc.) y deja el ojo muy abierto y más expuesto, lo que puede acarrear sequedad ocular y daños en la córnea.
Recuperación
La operación de párpados y la reconstrucción palpebral la realizamos generalmente con anestesia local y de forma ambulatoria, sin necesidad de ingreso. En función del problema a tratar y de la técnica practicada, podrás requerir un mayor o menor tiempo de recuperación.
Es normal que al principio notes el ojo hinchado y amoratado, y tengas molestias oculares y dificultad para parpadear. Tampoco debes extrañarte si experimentas visión borrosa, debido a las pomadas que tendrás que aplicarte en el ojo.
Tu oftalmólogo te explicará de forma detallada el tratamiento postoperatorio y la pauta de visitas de control que debes seguir, así como las precauciones a tener en cuenta para ir recuperando tus actividades cotidianas de forma paulatina (por ejemplo, las primeras semanas es importante que evites esfuerzos bruscos y baños en la piscina o el mar).